Técnicamente, la ansiedad es la preocupación por un evento que se avecina. Anticipamos el futuro con predicciones a veces escalofriantes, que no son necesariamente verdaderas. En la vida diaria, los síntomas físicos y emocionales de la ansiedad pueden significar un aumento de la frecuencia cardíaca, que nos pueden llevar a problemas cardíacos graves, una concentración pésima en nuestras tareas, problemas para dormir y ser un viejo gruñon para la familia, amigos y compañeros de trabajo.
La ansiedad y el estrés son respuestas físicas y emocionales a una sensación de peligro que percibimos, pero que no siempre es real. Y dado que la mayoría de nosotros no estamos tenemos que huir de fieras salvajes en medio de la selva, a menudo son las pequeñas cosas las que nos ponen al borde del abismo: un buzón de correo electrónico sobrecargado, la hora pico de la mañana, o perder esas llaves antes de salir corriendo por la puerta. Afortunadamente, es fácil vencer este tipo de estrés con sólo unos pocos cambios fáciles añadidos a lo largo del día.
Nota: Si usted siente que podría estar enfrentando un trastorno de ansiedad grave, por favor hable con un profesional médico acerca del tratamiento. Hay muchas opciones disponibles para controlar sus síntomas. Pero si usted está buscando reducir la ansiedad diaria, estos 15 consejos le ayudarán a estar calmado y tranquilo en poco tiempo.